En nuestro país, el ciclo lectivo 2014, cerró con un promedio mensual de alrededor de 100 hechos de este tipo alertados a la dirección de los establecimientos educativos.
El 70 por ciento se registró en Capital Federal, Conurbano Bonaerense, Rosario, Mendoza, Córdoba, Neuquén, Chunut, Salta, Corrientes y Mendoza.
La Lic. María Zysman, Directora de Libres de Bullying, sostiene que cuando las agresiones (simbólicas, físicas, verbales, y de exclusión social) son intencionadas y dirigidas siempre a la misma persona existe bullying. Estos actos procuran menoscabar la autoestima. Avanzan en la medida que generan terror en quienes lo padecen y silencio cómplice de los que observan…y no hacen nada para erradicar estas prácticas patoteriles, que nada tienen que ver con el auténtico sentido de la educación y el compartir en la Escuela.
Mientras aguardamos respuestas y todas las medidas que sean necesarias para que esta expresión de negatividad no crezca, compartimos algunas sugerencias extraídas del documento elaborado por el Consejo Federal de Educación, para combatir a este auténtico mal de nuestro tiempo.
¿Qué hacer ante situaciones de acoso escolar?
- Tener en cuenta los pedidos de ayuda de los alumnos.
- Es necesario que toda persona adulta de la escuela que vea hechos de acoso, etc, intervenga, disminuyendo la carga emocional. Frente a la agresión física, separar a los contrincantes, calmarlos, propiciar el diálogo con cada una de las partes, de manera independiente. Si se lastimaron, de inmediato comunicarse con el servicio de emergencias médicas.
- Involucrar al grupo, convocar a las familias, proponer espacios para el entendimiento. Realizar un registro escrito de lo ocurrido, comunicar las sanciones.
- Es importante que cada institución defina que tipo de elementos los estudiantes pueden llevar a clase y cuáles no. Para concientizarlos acerca de lo que es una herramienta de trabajo y como tal, no sirve para hacer bromas.
En tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) consideró a este tipo de violencia, como la epidemia del siglo XXI.